Jugó apenas seis minutos, pero marcó en la definición desde el punto penal y gritó campeón. Julián Álvarez parece tocado por una varita mágica: el ex River de apenas 22 años alzó su decimotercer título y sigue festejando.
Manchester City y Sevilla definían la Supercopa de Europa e igualaron 1-1 en un partido que no estuvo a la altura de lo que se esperaba. Algo había advertido Pep Guardiola en la previa, las bajas por lesiones en ambos equipos afectaron el nivel del juego, sumado a que recién están dejando atrás una pesada pretemporada. Sin De Bruyne ni Bernardo Silva, Guardiola dejó en el banco al delantero campeón del mundo, debido a que arrastraba una molestia y lo mando al campo sobre el final.
En-Nesyri había puesto en ventaja a Sevilla en el primer tiempo, cuando el conjunto español fue muy superior al inglés, sin embargo en el complemento un buen cabezazo de Palmer mandó la definición a los penales. Allí el City no falló (5-4) y se quedó con el título.